La Municipalidad
del distrito de Miraflores, en Lima, atraviesa un capítulo extraño y hasta
jocoso luego de que la presencia de cientos de gatos en uno de sus principales parques
empezara a causar enfrentamientos entre los vecinos y hasta con el cura de esa
parroquia, a quien acusan de haber matado a algunos felinos cuando estos
habrían ingresado en la iglesia.
Los gatos viven
libres, no tienen dueño y hasta son alimentados y vacunados por algunos
generosos vecinos que hasta les brindan asistencia veterinaria y están
pendientes de ellos. Los gatos se pasean por el parque y son animales dóciles,
cientos de ellos, de todos los colores, edades y tamaños retozan por los
parques, trepan por los árboles y viven felices en ese lugar.
Pero, la Dirección
General de Salud Ambiental – DIGESA está preocupada por la salud de los
vecinos, porque dice que la presencia de los gatos puede causar muchas
infecciones. -Y tienen mucha razón-
Y es que no solo en
el Parque Kennedy se encuentran a gatos abandonados, sino también en el parque
7 de junio y en la plazuela Raúl Porras. Los adultos y no adultos juegan con
ellos, e incluso estos gatitos reciben ayuda de un grupo llamado “Los gatos del
parque de Miraflores”. A pesar de esto, estos animales no están libres de
enfermedades. Según DIGESA Sus parásitos pueden causar ceguera o abortos si
llegan a ser ingeridos por los humanos.
Así que se pondrá
en marcha un plan para controlar el número de felinos que vive en la calle. Y
es que, a pesar de que la Municipalidad de Miraflores impulsa cada fin de mes
la adopción de 100 gatitos, siempre aparece la misma cantidad abandonada
después.
Hace unos meses,
los gatitos estuvieron en peligro. Muchos de ellos aparecieron muertos en las
calles y cuando se investigó qué les había pasado, se descubrió que fueron
envenenados. Por eso, la municipalidad redobló esfuerzos para la seguridad de
los gatitos. Pero ahora se trata también de proteger a los vecinos adultos y no
adultos.
Los gatitos del
parque de Miraflores son “parte del paisaje”, según un vigilante. Pero, no es
justo que un animalito viva en la calle si puede tener una familia que lo
adopte y le brinde cuidado y cariño. Esperemos que se solucione el problema de
vivienda para que no perjudique a ninguna persona.
Mientras tanto el
sacerdote de esa parroquia ha tenido que ser relevado por su seguridad, pues
los constantes enfrentamientos con el vecindario eran frecuentes, por otro
lado, si alguno de los gatitos ingresaba a la casa parroquial, salía
sospechosamente malherido o no volvía a salir, lo que desató la ira de los
vecinos defensores de los gatos y causó un enfrentamiento terrible con el
endemoniado cura.
Los gatos han
generado un conflicto en Miraflores entre dos grupos opositores. Parece que al
pobre Ollanta Humala hasta los gatos se han propuesto causarle conflictos, -a la
huelga de los médicos y de los profesores se sumaría en breve la de las
enfermeras…-
Se espera que esta
gatuna historia tenga un final feliz y que los gatos sean reubicados y no vayan
desapareciendo suspicazmente – sabemos bien que hay grupos de personas
que hacen suculentos estofados con ellos y se los devoran al son de un cajón y
una guitarra – Por el bien de los gatos, los curas y porque no estalle
un conflicto más entre un vecindario que tiene que ser escuchado y atendido en
sus justas, aunque contrarias, demandas.