El Director del
penal de Lurigancho tuvo una idea “descabellada”
o más bien de descabellar a los 7,200 reos que alberga uno de los penales más
peligroso del mundo, en un intento por imponer la disciplina en medio del caos
que convive a diario con la población carcelaria de ese penal.
“El corte de pelo es para un mejor control y
seguridad de los internos, porque hay reos que tratan de aprovechar el pelo
largo para fugarse disfrazados de mujeres”, declaró ante la prensa el coronel
PNP Tomás Garay, cuando le surgió la peregrina idea.
El jefe policial
informó también de que algunos presos ingresan en los pabellones del centro de
reclusión con aretes, piercings o peinados tipo cresta de gallo, cola de ratón
o de lagarto y advirtió que “esto no se puede permitir”, por ello tomaba la
medida que a la postre no le resultó muy beneficiosa.
“Queremos que
Lurigancho, que está considerado uno de los penales más peligroso del mundo,
pase a ser el más seguro del mundo”, señaló el iluso Garay, por ello había
contratado a doce peluqueros para que en el penal y durante 15 días corten el cabello
a los reos. Pero los presos no estaban de acuerdo con la medida y dijeron de
inmediato “nadie nos toca un pelo”.
Ante la noticia la
Defensoría del Pueblo rechazó la medida y recomendó al director del penal que
deje sin efecto la decisión por considerarla “humillante y degradante, que
afecta el derecho al libre desarrollo de la personalidad e integridad física
tanto de procesados como de condenados”. -además de atentar contra las seguridad
de piojos, liendres y otros bichos -
Lo cierto es que la
orden del coronel fue suspendida cuando ya algunas cabezas habían sido rapadas.
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) removió al coronel PNP Tomás Garay
como director del penal de Lurigancho por su decisión de rapar a los internos
en un plazo máximo de 15 días.
Como se recuerda el
ministro de Justicia, Juan Jiménez Mayor, también cuestionó esta medida. Según
el director ejecutivo de Operaciones de la Policía, Abel Gamarra, explicó que
Garay será sustituido por el coronel PNP Luis Morales, según lo dispuso el
director general de la institución policial.
“A raíz de las
noticias difundidas en las últimas horas, el director general (de la Policía)
ha dispuesto el cambio del coronel Tomás Garay por el coronel Morales con la
finalidad de dar tranquilidad al penal”, expresó Gamarra.
El alto oficial
indicó que Garay será transferido a otra unidad policial, luego de ser
criticado por el Ministerio de Justicia y la Defensoría del pueblo por ordenar
el corte de pelo de los reos para evitar que fugaran de dicho penal.
Probablemente las
buenas intenciones de Garay fueron una gran torpeza que le ha costado una
sanción que resulta polémica. En otros países los presos son rapados como parte
de un proceso disciplinario más que de seguridad y no es nada atentatorio, sin
embargo aquí en nuestro país ha sido observado por la Defensoría – aquella que
no defiende los derechos de los niños abandonados por ejemplo o de los hombres
golpeados injustamente por policías o de mujeres violentadas…-
Sin duda el buen
Coronel Garay esta vez se fue por lana y salió trasquilado.