La noticia que publicó Panorama Cajamarquino en su edición de ayer causó revuelo en la región. Cien personas, en los cinco primeros días de este mes migraron al distrito de la Encañada. Noticia no tendría mayor relevancia si se trataría de una temporada cualquiera, pero el hecho ha causado suspicacias porque nos encontramos en un periodo preelectoral.
Existe un término muy peruano que es el de “golondrino” cuyo significado se remite a la migración que hace una persona en cierta época para un determinado hecho o labor, se hablaba de los golondrinos que migraban de la sierra a la costa para cortar caña en una época del año, periodo que duraba dos o tres meses y luego del cual retornaban a su lugar de origen.
Lo mismo sucede con un sector de la población que en época de elecciones migra sospechosamente de un lugar a otro, bajo el aval y con los costos cubiertos por el interesado, en este caso, siempre suele ser uno de los participantes en la contienda electoral.
Para nadie es una novedad que la Encañada, debido a la posición geográfica en la que se encuentra es el distrito más privilegiado del país, gracias a la minería que se realiza en todo su territorio, sin embargo ello no le ha significado - hablamos de los últimos años y de varias gestiones ediles – que por ello sea el distrito más destacado del país. Uno de sus alcaldes confundió el progreso y desarrollo con un coso taurino y un estadio, olvidando las necesidades básicas como postas, colegios, mercado, agua, desague...
Pese a que la RENIEC Cajamarca ya anunció que los autores de este delito de conformidad al artículo 359 inciso 8 del Código Penal, podrían ser castigados con pena privativa de la libertad no menor de dos años ni mayor de ocho, los golondrinos siguen haciendo de las suyas.
“Se tiene previsto el cierre del Padrón Electoral para el próximo 6 de junio. Por ello, RENIEC de conformidad con lo dispuesto por la Ley del Procedimiento Administrativo General, efectuará “una fiscalización posterior de oficio, mediante un sistema de muestreo, de la veracidad de los cambios de domicilio efectuados recientemente, a fin de prevenir los ya acostumbrados votos golondrinos, que constituyen atentados contra el derecho del sufragio” ha expresado la titular del RENIEC Cajamarca.
Ojalá que este tipo de ardides sean detectados, como de hecho lo han sido ya, a tiempo y no se burle la voluntad popular y los golondrinos no tengan otra significación que aquellos pequeños tumores que se forman en las axilas por la inflamación de ciertas glándulas.
La migración de algunas personas no es anormal, es un proceso normal que se produce con frecuencia cada año, pero cuando esta sucede en tal magnitud y en tan corto tiempo, hacia el distrito más solvente o al que recibe mayores beneficios por concepto de canon y en un año electoral, la situación es sospechosa y las dudas lo asaltan al más crédulo.
El viejo dicho de que una golondrina no hace verano hoy es más cierto que nunca, porque ciertamente una no hace un verano, pero una centena ya elevan la temperatura, anuncian un verano y alguien tiene que estar tras de todo esto.
Y como dice la canción de José Luis Rodríguez El Puma: Sí para que te voy a mentir / si más tarde o más temprano lo sabrás / te lo dirán…