El Director Regional de Minería, Honorato Hernán Flores Lozano, en recientes declaraciones a la prensa ha expresado su preocupación por el riesgo que corren un grupo de policías quienes estarían expuestos al contacto con cianuro – sustancia química letal, de uso industrial y minero- el que recuperado en distintos operativos a los mineros informales en la provincia de Cajabamba. Y su preocupación es aceptable y lógica, dada la letalidad del cianuro y de el riesgo de su volatilidad con algunos ácidos – en las cámaras de gas se los suele combinar con un ácido para causara la muerte instantánea de la víctima -.
El funcionario ha mencionado además que la Fiscalía no se quiere hacer responsable de esa tonelada y media, según sus palabras, que habría sido incautada entre las comisarías de Cajabamba y Chuquibamba, sin embargo el Fiscal Lúcido Boy Palacios, Fiscal Provincial de Cajabamba ha explicado que en realidad se trataría de falta de condiciones de un lugar apropiado en esa sede para almacenar la sustancia química de alta peligrosidad.
Honorato Flores Lozano ha hecho la propuesta de comercializar la sustancia agregando que solo Minera Yanacocha y Minera Gold Fields son las que usan el cianuro en sus procesos de obtención del oro. Información errónea para ser emitida por un funcionario minero, Minera San Nicolás utiliza un aproximado de 500 kilogramos de cianuro por mes, información que seguramente el Director Regional de Minería ha olvidado obnubilado por las ingentes cantidades que las citadas mineras manejan de ese producto.
Pero al margen de ello ¿Es legal que se venda a la minería formal el cianuro decomisado a los mineros informales? ¿Está facultado el Director Regional de Minería a realizar ese tipo de transacciones? ¿Está dentro de su competencia?
El Fiscal Provincial de Cajabamba ha indicado que en situaciones anteriores, se ha dirigido por escrito a diversas instituciones solicitando el internamiento de los insumos químicos fiscalizados recuperados, ante la peligrosidad de su toxicidad, lo que parece más consecuente y sobre todo más responsable.
Otros insumos químicos fiscalizados que han sido recuperados en esa zona son la cal común, zinc en polvo, acetato y hasta crisoles, que si bien no son peligrosos, deben ser agentes incómodos en una comisaría.
Por el bienestar de los efectivos policiales de esas comisarías y por la salvaguarda de su salud y sus vidas urge que el Estado traslade esas sustancias químicas a lugares seguros. Pero definitivamente vender cianuro incautado y ya manipulado no es la mejor idea.