Roberto Cantoral falleció el sábado, su partida ha dejado un vacío incalculable en la música y no hablamos de la música de solo una nación, porque su arte trascendió de modo tal que sus canciones se hicieron himnos de amor en cada país donde se difundieron. Canciones como “La barca”, “El triste”, “Reloj”, “El preso número 9” entre otras que marcaron época.
Cantoral fue el arquitecto de muchas canciones que se hicieron conocidas en el mundo entero, sus temas se tradujeron a otros idiomas y sus melodías, impregnadas de esa universalidad que tienen las notas musicales sonaban igual en chino, ruso, alemán o cualquier idioma complejo, porque la música es universal aunque no lo sea así la palabra.
Sus temas fueron interpretados por connotados pianistas y orquestas de todos sitios, lo mismo tocaba “El reloj” Richard Clayderman que Raúl Di´Blasio seduciendo a auditorios enteros con la profundidad de sus temas. Si hubo un compositor realmente prolífico y exitoso lo fue Roberto Cantoral. Opacó incluso a su compatriota Armando Manzanero aunque siempre las comparaciones resulten odiosas y abyectas.
En un mensaje divulgado en su página de internet, la SACM refirió su deceso así: "Ese gran hombre, cuya barca inundada de música y poesía recorrió el mundo entero, vio detenerse las manecillas en su fecundo reloj".
Los restos del compositor fueron velados en las instalaciones de la SACM en la capital mexicana, ubicada al este de Toluca, a donde fueron trasladados tras su fallecimiento, y horas después se realizó un homenaje de cuerpo presente en el Palacio de Bellas Artes.
Cantoral compuso canciones que han sido interpretadas por diversas figuras como Plácido Domingo, José José, Emmanuel, Olga Guillot, y Luis Miguel.
También compuso piezas para telenovelas como "El derecho de nacer", "Paloma" y "Pacto de amor", según la biografía de Cantoral elaborada por la SACM, la cual dirigió desde principios de la década de 1980 hasta su muerte.
Nació el 7 de junio de 1930 en Ciudad Madero, en el estado norteño de Tamaulipas, informó el área de prensa de la SACM, que tras versiones de que había nacido en 1935 corroboró la fecha precisa con uno de los hijos del compositor.
Junto con su hermano Antonio, Roberto formó un dueto en 1950 y comenzaron su carrera creativa con las obras "El preso número 9" y "El crucifijo de piedra".
Cantoral formó posteriormente el afamado trío "Los Tres Caballeros", que por años fue uno de los rostros de la música romántica mexicana y con el que viajó por diversos países.
Aunque escribió diversas canciones, quizá "El reloj" y "La barca" son dos de las más conocidas dentro y fuera de México, las cuales según la SACM fueron grabadas en más de 1.000 versiones.
En 1971 ganó el Festival OTI con la canción "Yo no voy a la guerra", y en 1973 volvió a triunfar en ese festival con la obra "Quijote".
En noviembre del 2009 recibió el Premio del Consejo Directivo de la academia de los Latin Grammy.
A Cantoral le sobreviven su esposa, sus cuatro hijos, varios nietos y millones de seguidores que se sintieron identificados a lo largo de su vida con esos temas inolvidables, esos que ahora son patrimonio de la humanidad y que se harán mayores con cada nueva historia de amor, con cada nuevo romance que surja en el tiempo y que han de viajar en esa barca indescifrable de la vida y sus misterios.