El Colegio Coronel
Cortegana de la provincia de Celendín cumple 76 años de servicio a los
celendinos. 76 años de ser la fuente inagotable de sabiduría de muchas
generaciones que de alguna manera han dibujado la historia de un pueblo que
tuvo un rol protagónico en la historia del Perú y que ha escrito su nombre en
las páginas de las artes como no lo ha hecho ningún otro pueblo de nuestra
patria.
La trayectoria del
Colegio Emblemático Coronel Cortegana es una larga historia de sucesos que
fueron creciendo junto a la historia misma de Celendín, muchos de sus alumnos
egresados, hoy ocupan puestos notables en distintos estamentos del Estado y en
otros privados, algunos se consolidaron como artistas notables y recorrieron su
arte por el mundo, otros ejercen cargos claves en empresas de todos los rubros.
Algunos decidieron quedarse en su tierra por el amor al terruño que los
celendinos saben inculcar a sus hijos desde nacidos.
Los frutos de un
colegio son la prueba fehaciente y contundente de la educación que recibieron y
pese a que los docentes en el Perú siempre tuvieron un lugar casi olvidado los
docentes de antes y de ahora del Coronel Cortegana, supieron cultivar hombres
de bien en cada uno de sus alumnos y alumnas.
Dice el hablar popular
que cuando Neil Armstrong llegó a la luna encontró a un celendino vendiendo
sombreros, habría que añadir que ese celendino era corteganino.
Las pequeñas
lecciones cotidianas que cada alumno del Coronel Cortegana recibía cada día, se
fueron haciendo un hábito, el hábito hizo que la cultura se convierta en cada
uno en una costumbre, la costumbre por consiguiente forjó el carácter de cada
uno de ellos y ello conllevó a labrar su personalidad. No hay un celendino ni
corteganino que no tenga una destreza vinculada al arte y la cultura, desde los
escritores más ilustres hasta los artesanos más magníficos capaces de elaborar
bellos sombreros con paja toquilla y que es el emblema de un pueblo digno y
valiente.
El Colegio Coronel
Cortegana celebra sus LXXVI-FIESTAS JUBILARES
CORTEGANINAS - BODAS DE DIAMANTE, hoy cultiva lo sembrado con la visita de
personajes ilustres que estudiaron en sus claustros y que vuelven cada año a su
pueblo, al calor del hogar materno a dibujar en la memoria las horas vividas en
un colegio que supo trasmitir valores por la excelencia de sus profesores, de
su personal administrativo, de su personal de servicio… de todos aquellos que
cada día saben que están sembrando la mejor semilla del mundo, porque están
sembrando vida y porque mañana cosecharán hombres de bien con conceptos de
libertad y amor pero también con carácter y personalidad para defender lo suyo
cuando se sienten amenazados.
El nombre del
colegio no pudo ser elegido de modo mejor, Basilio Cortegana sintetiza la
grandeza de un espíritu noble y digno, peleó por su patria en todas las formas
y maneras, fue enemigo de las cadenas
opresoras y escribió varios tomos de la historia del Perú, nunca se desvinculó
de su pueblo y siempre, mientras pudo volvió a él, porque así se lo enseñaron,
porque así se sigue enseñando a cada celendino y celendina de hoy.
La frase: “Crecerá Vuestra
Gloria Como Crece La Sombra Cuando El
Sol Declina” dicha por José Choquehuanca a Bolívar luego de la Batalla
de Ayacucho, batalla en la que el Coronel Basilio Cortegana peleó, hoy es
exacta para el colegio, su gloria crecerá Como Crece La Sombra Cuando El Sol Declina, por los docentes que
tiene, por el maravilloso equipo humano y porque trabajan con vidas, con seres
humanos, que aunque hoy jóvenes serán mañana los hombres y mujeres que acojan
las generaciones posteriores y a la cual la nuestra les dará la posta para que
sigan por la senda de la eterna melodía del saber y la cultura cuando ya nosotros
no estemos, cuando ya nos hayamos ido.