rss facebook twitter linkedin youtube

Síguenos en FACEBOOK

jueves, setiembre 12, 2013

Dislexia entre municipalidad e INC


El viejo conflicto entre las funciones que deben asumir la Municipalidad Provincial de Cajamarca y la Dirección Regional de Cultura ha sido reiterativo en los últimos años por el desconocimiento existente por parte de los ediles sobre las funciones del exINC y del mismo municipio.

El presupuesto con el que cuenta la Municipalidad para protección del patrimonio es ingente, la Dirección Regional de Cultura en cambio tiene un presupuesto paupérrimo y debe autofinanciar sus partidas para cubrir necesidades elementales, todo lo recaudado por acciones generadas por el turismo como es el circuito del centro de la ciudad – entradas por vistas al Cuarto del Rescate, Iglesias y Catacumbas, Complejo Monumental de Belén y Cumbe Mayo- debe ser remitido religiosamente a Lima. Cajamarca es la caja chica del Ministerio de Cultura a diferencia de la Dirección Regional de Cultura del Cuzco quien sí administra sus recursos y puede reinvertir para cubrir sus necesidades más urgentes.

Se ha culpado en casi todas las gestiones municipales  a la Dirección Regional de Cultura y hasta se pretende satanizar la actual gestión como ha sucedido con el caso de la construcción y/o remodelación de la nueva comisaría, se ha pretendido culpar a la directora Regional de Cultura, arquitecta Carla Díaz, como si ella fuese la responsable de que la histórica casona situada en la plazuela Amalia Puga esté ubicada dentro del Centro Histórico.

La ignorancia es sinónimo de desconocimiento eso hace que se culpe a instituciones que nada tienen que ver en las ordenanzas. Se quiere culpar del mal estado de la exiglesia de Nuestra Señora de la Merced, hoy mercado central, del mismo modo del pésimo estado de la vetusta casa de nuestro patricio Toribio Casanova, del deterioro del Cuarto del Rescate, del hundimiento de los pisos de las principales iglesias, del deterioro y desaparición del Centro Histórico cuando la Municipalidad que es la llamada a velar no solo por temas legales, sino presupuestales no ha movido un dedo y solo se ha lavado las manos.

Los más osados – increíblemente varias autoridades en ese grupo-, han sugerido la demolición inmediata del mercado central para construir modernas galerías con cocheras subterráneas incluidas. Otros en el colmo del desconocimiento han sugerido que cualquier inversión en la pileta de la Plaza de Armas es un gasto inútil pues aseguran que esta debería ser reemplazada por una nueva, a ese paso acabaremos demoliendo las iglesias para construir edificios de treinta pisos y creer que por ello somos una ciudad moderna.

Lo más fácil es atribuirle la responsabilidad a la Dirección Regional de Cultura, hablar sandeces  porque se está frente a un micrófono aunque no se tenga la menor idea de lo que se está hablando y algunos aun piensan que una mujer no tiene la capacidad para dirigir con brillantez una institución; el machismo en su máxima expresión, el desconocimiento y la falta de investigación.


Urge un plan concertado y verdadero que una las fuerzas de ambas instituciones y se haga capitular de una vez para todas a los destructores del Centro Histórico si apuntamos a convertirnos en Patrimonio Cultural de la Humanidad algún día.

Balcon Interior

Bienvenidos a este espacio donde compartimos comentarios de opinión de Cajamarca Perú