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miércoles, diciembre 17, 2008

“El beso del adiós, perro”



Fue la expresión que lanzó el periodista iraquí Muntazer al Zaidi cuando arrojó su par de zapatos al rostro del presidente norteamericano George W. Busch mientras daba una conferencia de prensa en Irak.
Las imágenes dieron la vuelta al mundo en minutos, las páginas web de los periódicos del mundo mostraban la escena y el video se hizo popular en minutos, sin embargo existe un hecho de fondo que ha generado polémica en los ya famosos zapatos lanzados.
¿Hasta que punto es aceptable esa actitud, ese atentado contra el presidente norteamericano? Busch se ganó anticuerpos a los largo y ancho del mundo, su política de invasión y de permanente sometimiento a otras naciones le generó enemigos en todas partes del mundo, enemigos grandes y pequeños, desde los que pueden enfrentar a la nación más poderosa del mundo con políticas económicas hasta misiles o simplemente aquellos que solo pueden lanzar zapatos.
Se habló de libertad de prensa – obviamente lanzar un par de zapatos no puede ser libertad de prensa, aunque probablemente se trate más de un libertinaje”
“Este héroe debe tener un juicio justo, y cerca de 200 abogados árabes se han presentado como voluntarios para defenderlo”, expresó el abogado Al Duleimi, jefe del equipo de defensa del difunto presidente iraquí Sadam Husein, ejecutado el 30 de diciembre de 2006.
La ley iraquí indica que quien es acusado de insultar a un jefe de Estado extranjero en visita a Irak, se enfrenta a un mínimo de dos años de prisión, cargos que afrontaría el periodista luego de ser detenido por efectivos de seguridad estadounidenses además de algunos de sus compatriotas.
El mandatario saliente le restó importancia al hecho. “Si a alguien le interesa, eran zapatos de número diez los que tiró hacia mi persona”, indicó con cierto sentido del humor, de hecho sus reflejos están en excelentes condiciones, esquivo los dos zapatos con pericia.
En la cultura árabe recibir ataques con zapatos es una señal de profundo desprecio, ya que el agredido es comparado con un perro.
La violencia no se justifica bajo ningún criterio, matar a miles de personas en nombre de la paz y cuando el fondo real es el petróleo es tan violento como lanzar un par de zapatos, la violencia siempre engendrará violencia y eso Busch lo sabe bien, ese par de zapatos así le han advertido.

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